Frente al auditorio vacío y a oscuras del Palacio de la Ópera, Alondra de la Parra se sienta para conversar con ABC. Apenas hace una hora que ha rematado su primer ensayo con la Sinfónica de Galicia, con la que interpretará por primera vez en Europa la ‘Sinfonía imposible’ de su compatriota Arturo Márquez, pieza que ella comisionó y estrenó mundialmente el pasado julio. «Suelo ponerme nerviosa en el primer ensayo, porque no conozco la orquesta, no sé si me preparé bien», pero cruzado ese rubicón «se responden el 90 por ciento de las preguntas».
Para la directora mexicana suele haber muchas. Por la inercia de los tiempos, abundan las referidas al género y al papel de hombres y mujeres sobre el podio. «Quizás haya habido alguna entrevista donde no me mencionen ese tema -bromea-, espero el día donde no se tenga que mencionar». No obstante, se presta al juego, porque si algo la caracteriza es que no se esconde detrás del atril ni agita la batuta cual varita de mago para esquivar cuestiones incómodas. «Claro que existe lo masculino y lo femenino en la música, pero no tiene que ver con el intérprete, sino con la música en sí».
«Sigue siendo triste que pensemos en directoras y directores», lamenta, «yo solo veo artistas. Me interesa cuál va ser su idea, no su género. Todas las directoras metidas en un mismo costal, yo no sé si tenemos nada que ver unas con otras por el simple hecho de ser mujeres». Solo le interesa el relato que tengan al frente de la orquesta, la historia que quieran contar desde una expresividad propia. «Yo me considero una artista que dirige -se define-, me planteo cómo diseñar el sonido y hacer que estos músicos reaccionen desde sus fibras más internas y puedan expresar algo que tenga un valor para ellos y para el público».
De la Parra se despoja de cuantos atavismos lastran la figura del director. «La música de concierto y el rol del director han sido forjados con estereotipos totalmente masculinos, patricarcales y obsoletos para lo que hacemos». A su juicio, se ha configurado una idea de «una figura con frac que es como una caricatura», fruto «de un concepto de liderazgo que ha permeado a nuestra humanidad durante toda la historia».
Por las venas de Alondra de la Parra (Nueva York, 1980) corre sangre de artista. «Mi abuela era una grandísima escritora [Yolanda Vargas Dulché], mi abuelo y mi padre también [Guillermo y Manelick de la Parra]; mi tía es actriz [Emoé de la Parra] y mi hermano es actor y cantante [Mane de la Parra]». «Yo canté y bailé mucho y me contaron muchas historias» en Ciudad de México, donde se trasladó con dos años. La música es precisamente eso para la directora, ese relato que se construye sobre el guión que el compositor escribe en la partitura.
A los siete años inició sus estudios de violonchelo, y a los trece los de piano. «Ahí dije que quería ser directora». Continuó sus estudios en la Manhattan School of Music y con apenas 23 años fundó la Orquesta Filarmónica de las Américas. Su afán era disponer de un instrumento con el que difundir la música del continente americano, desde Aaron Copland hasta Alberto Ginastera, pasando por José Pablo Moncayo, Inocente Carreño, Leonard Bernstein o el propio Márquez.
«Durante muchos años faltó la curiosidad de parte de los países europeos, que eran y son el centro de la música clásica». Estaban «ensimismados», secuestrados por un «eurocentrismo» que les llevaba a pensar «que la música latinoamericana no existía». En su apostolado la han acompañado Gustavo Dudamel, Andrés Orozco Estrada, Gabriela Montero o Giancarlo Guerrero, nombres propios de la escena clásica internacional. «Veinte años después estamos en un lugar de más normalidad», aunque las páginas de estos autores «siguen sin ser parte del repertorio estándar».
Su primera vez en un atril fue a los 19 años. El veterano Charles Dutoit la invitó a subirse en un ensayo en el magno Teatro Colón con la Filarmónica de Buenos Aires. «Desde el primer momento que me subí sentí que ese era mi sitio para vivir, que estaba en el lugar correcto». Su batuta -que «nunca» le ha temblado- la han seguido en los últimos años orquestas como las de París, Verbier, la Radio de Berlín, Dresde, Montecarlo, Malmoe, Barcelona, la BBC, Copenhague… La lista es larga.
De la Parra relativiza. «Son pasos mundanos de carrera, ese no es el trabajo del director». Otro tic de tiempos pasados. «¿Ser director es la carrera, tener mil orquestas, ser muy famoso? Es todo muy él», en masculino singular. Ella vuelve a la idea del artista. «El repertorio es tan amplio y tenemos tanta historia hacia atrás y delante de música y sonidos que descubrir que siempre hay algo nuevo que aprender. Eso es parte de mantenerse como un niño».
Embajadora cultural de México, ha estrenado recientemente en su país el espectáculo ‘The silence of sound‘, en el que música sinfónica y mímica se maridan. «Es un proyecto para niños de 0 a 120 años con las obras que amo», desde Debussy a Prokofiev, Brahms y Bartok. Sueña con exportarlo fuera de su patria y que llegue a las nuevas generaciones para su propio despertar ante la música de concierto, «que no clásica, un pésimo nombre». «La música de seria no tiene nada, somos artistas, juglares, nos tenemos que arriesgar y empujar los límites hasta donde se pueda».
También ha puesto en marcha en su país un proyecto homologable a los sistemas de orquestas que el maestro José Antonio Abreu inició en Venezuela. «Funcionan al 100%», defiende De la Parra, «si ves la cantidad de niños que igual no se dedicaron a la música y pasaron por ahí… Ser artista es un regalo; te impide meterte en miles en otras cosas porque ya probaste algo que es de las cosas más hermosas de la humanidad, cómo vas a regresar a hacerte daño o hacérselo a otros».
«La música es el alimento del alma», añade, «cuando pienso que la educación solo se enfoca en matemáticas, lengua y algo de ciencias… ¿Y la música qué? No es un privilegio para aprender a tocar un concierto bonito y que tu abuelita te aplauda, es mucho más». Se fija una meta. «Tenemos que llegar un día en que las naciones más avanzadas entiendan que hay que enseñar matemáticas, lengua, filosofía y música; eso hacían los griegos. ¿Por qué lo perdimos?».
Mientras llega ese día -y si es que llega-, De la Parra seguirá dirigiendo en un tiempo en el que dice percibir muchas ganas de música. La pandemia obligó a la sociedad «a un ayuno absoluto de música humana, análoga» y forzó a «una saturación de lo digital y las pantallas». Ahora, «abres las puertas y vienen corriendo». Ella estará esperando en el atril.
Ciudad de México, 28 de julio de 2022.- La directora de orquesta, Alondra de la Parra, la reconocida Clown mexicana Gabriela Muñoz, “Chula The Clown” y GNP Seguros presentan una gira por diferentes ciudades del país con su espectáculo The Silence of Sound, mezcla de música orquestal y artes escénicas que tuvo su estreno mundial durante el Festival PAAX GNP 2022.
The Silence of Sound es un nuevo proyecto escénico en el que Alondra y Gabriela llevan trabajando más de seis años y que surge a partir de encontrar en la música un punto en común entre sus diferentes disciplinas, desarrollando así todo un concepto que es original desde su concepción.
Se trata de la historia de una Clown cuya vida se transforma cuando descubre la belleza de la música. Sin embargo, pronto se da cuenta de que este maravilloso mundo nuevo tiene sus propios peligros inherentes. Confrontarlos y sobreponerse a ellos, la llevará al borde de la locura.
Con música de Debussy, Bartók, Stravinsky, Prokofiev, entre otros, este espectáculo tiene la misión de acercar la música orquestal y el repertorio sinfónico a audiencias diversas.
Este proyecto escénico se presentará en diferentes estados del país durante el mes de septiembre, para que todos los públicos tengan la oportunidad de disfrutar del talento de estas dos mujeres mexicanas creativas que han puesto en alto el nombre de nuestro país a nivel mundial en sus respectivas disciplinas.
The Silence of Sound cuenta también con la Dirección de Arte de la artista chilena-alemana Rebekka Dornhege Reyes, actualmente responsable de la escenografía y vestuario para L’Orfeo de Monteverdi en el Musiktheater im Revier en Gelsenkirchen; así como la Dirección Audiovisual de la realizadora y directora de Arte española, Mariona Omedes, quien ha colaborado con artistas como Bigas Luna, Jose Luis Guerin, Federic Amat, Manuel Huerga, Mariscal o El Tricicle.
Las fechas y lugares confirmados para la presentación de The Silence of Sound son:
Además, se tienen pláticas para llevar este proyecto a otros estados.
Con el apoyo de GNP Seguros, patrocinador de este y otros proyectos desarrollados recientemente por la directora de orquesta, como el mismo Festival PAAX GNP, o el video de La Orquesta Imposible que se distribuyó en 2020; la producción de este espectáculo se encuentra a cargo de Elekin Arts, compañía fundada por la propia Alondra de la Parra para el desarrollo de proyectos escénicos innovadores.
Sinopsis
Tras pasar muchos años en silencio y soledad, una Clown despierta de un sueño eterno debido al trascendente llamado de la música. Está guiada por un pájaro-oboe, fascinada por el sonido de los instrumentos de viento.
Su ensueño comienza a oscurecerse cuando descubre que está atrapada en una gran jaula de la que los pájaros pueden escapar, dejándola sola nuevamente. A partir de ese despertar, la Clown emprenderá un viaje en el que irá conociendo a diferentes personajes a través de universos por los que viajará en compañía de la música. La orquesta es el ecosistema del delirio en que es lanzada a través de partituras clásicas.
Sus acciones la llevarán al abuso de poder y al control excesivo, convirtiendo el sueño en una pesadilla. Sofocando a los músicos y personajes que encuentra en el camino, y haciendo explotar la música con un fuerte rechazo a su paso por ese universo, descubre su verdadero despertar.
¿Te imaginas a los mejores músicos del mundo tocando juntos en el Caribe Mexicano? Durante 5 días, México será la sede de un hito de innovación musical en el que artistas de más de 14 países vendrán a exponer música sinfónica, música de cámara y ballet.
De Alondra de la Parra a Chula the Clown. De La Orquesta Imposible a Abbey Road. De Romeo y Julieta a Finale Finale de Christopher Wheeldon. En ningún otro lugar del mundo se puede reunir toda la magia de una forma tan extraordinaria y única. Este es el FESTIVAL PAAX GNP, y así se vive la música sin límites.
Del 29 de junio al 3 de julio de este año, se llevará a cabo por primera vez el FESTIVAL PAAX GNP, en el Hotel Xcaret Arte en Quintana Roo. Un festival imperdible con lo mejor de la música clásica, la danza y la gastronomía.
Después del éxito innegable de La Orquesta Imposible, y como resultado de la colaboración entre Alondra de la Parra y GNP, surge esta iniciativa para reunir por primera vez en la historia dicha orquesta conformada por solistas de renombre internacional y acercar al público mexicano a los mejores exponentes mundiales de diversas disciplinas artísticas. Todo eso en el mejor escenario posible: el Caribe Mexicano.
El FESTIVAL PAAX GNP será el punto de encuentro de destacados talentos internacionales de la música y la danza. Un encuentro que promete salir de lo convencional para explorar la música de grandes artistas de forma nunca antes vista. La diversidad y el reconocimiento de las personalidades que conforman este festival lo vuelven único en el mundo.
Entre las piezas que se presentarán en el Festival, destaca el estreno de la Sinfonía Imposible, del compositor mexicano Arturo Márquez, así como el espectáculo The Silence of Sound, creado por Alondra de la Parra y Gabriela Muñóz “chula the Clown”. Se estrenará la coreografía Finale Finale, de Christopher Wheeldon y tendremos asimismo un fragmento de la nueva adaptación a ballet de la novela de Laura Esquivel “Como Agua para Chocolate», del mismo Wheeldon y muchas obras más (mayor detalle en el programa anexo). El festival cuenta con un elenco de destacados artistas entre los que sobresalen Nemanja Radulovic, Aleksey Igudesman, Guy Braunstein, Edicson Ruiz, el mexicano Rolando Fernández y Felix Klieser así como bailarines del Royal Ballet y del San Francisco Ballet.
Además de reunir lo mejor de la música, el Festival PAAX GNP busca promover la formación de niños y jóvenes de la región en un contexto musical de inclusión social. Con este objetivo nace el programa «Armonía Social» en el que se desarrollarán talleres de educación musical en distintas comunidades de los estados de Campeche, Yucatán y Quintana Roo. Armonía Social culminará en una presentación de los alumnos tocando lado a lado con las estrellas del Festival.
The Nuremberg State Philharmonic has scored a coup with the engagement of Alondra de la Parra. The 40-year-old Mexican replaced GMD Joana Mallwitz, who is on maternity leave. And because Mallwitz is leaving Nuremberg for Berlin in 2023, de la Parra could well be a successor candidate. This is amusing in that the Symphony Orchestra had already sought de la Parra in 2017 as the successor to principal conductor Alexander Shelley, but the conductor preferred to join the Queensland Symphony Orchestra in Brisbane, Australia.The Nuremberg State Philharmonic has scored a coup with the engagement of Alondra de la Parra. The 40-year-old Mexican replaced GMD Joana Mallwitz, who is on maternity leave. And because Mallwitz is leaving Nuremberg for Berlin in 2023, de la Parra could well be a successor candidate. This is amusing in that the Symphony Orchestra had already sought de la Parra in 2017 as the successor to principal conductor Alexander Shelley, but the conductor preferred to join the Queensland Symphony Orchestra in Brisbane, Australia.
https://www.latimes.com/espanol/entretenimiento/articulo/2021-08-31/concha-buika-y-la-directora-alondra-de-la-parra-unen-talento-en-ole-mexico?_amp=truehttps://www.latimes.com/espanol/entretenimiento/articulo/2021-08-31/concha-buika-y-la-directora-alondra-de-la-parra-unen-talento-en-ole-mexico?_amp=true
La directora de orquesta mexicana, el violista Antoine Tamestit y la orquesta Deutsche Kammerphilharmonie Bremen fueron aclamados con fervor en el auditorio Elbphilharmonie en Hamburgo
COMO SI FUERA DE UNA SOLA PIEZA
Bremen – Por Markus Wilks
La música de orquesta del siglo XX puede ser más emocionante y entretenida que algunos clásicos que se tocan habitualmente, al menos cuando actúas tan vigorosamente como Alondra de la Parra y la Deutsche Kammerphilharmonie Bremen. El primer concierto de suscripción Hanse-II contó con obras de Bacewicz, Bartók, Debussy y Stravinsky. Perfecto para destacar las cualidades solistas del conjunto, así como su regocijo de tocar.